Hasta aquí ha llegado la paciencia de María Teresa Campos… En los últimos días, en diferentes platós y distintos profesionales del medio, indicaban que Edmundo Bigote Arrocet no iba a descolgar el teléfono para arreglar las rencillas del pasado con la presentadora, para darle un nuevo final, menos amargo, a aquella historia de amor, pero…
…pero que si era ella quien marcaba su número, el humorista chileno no tendría problema en atenderla e intentar una reconciliación (entendida siempre en términos de restablecer la amistad previa a su romance). Unas teorías a las que se daba pie después de ver las lágrimas de María Teresa ante Bertín Osborne al hablar de lo machacada que le dejó la manera en la que rompieron: con un mensaje de WhatsApp de él en el que indicaba que no le iba a «humillar más».
Sus hijas y su nieta se han pronunciado, asegurado que nada más lejos de la realidad de un acercamiento. Ahora, le toca el turno a ella. A la protagonista. Será este sábado cuando se siente en el ‘Deluxe’ para zanjar las polémicas y dar un golpe sobre la mesa que consiga que se deje de especular sobre su vida privada.
Desde su entorno aseguran que sus hijas están preocupadas por la carga emocional que supondrá para María Teresa ponerse delante de los colaboradores del programa de Telecinco para dar las explicaciones pertinentes e intentar que se deje de hablar de este capítulo de su vida que, diez meses después de que se produjera el punto y final, quiere enterrar de una vez por todas.
A nadie se le escapa que, en los últimos años, la presentadora ha tenido varios ingresos hospitalarios (algunos por dolencias de mayor consideración que otras). Su salud y cómo podría afectar a esta, a alterarla, es lo que tiene en un brete a Carmen y Terelu, que no respirarán tranquilas hasta ver mañana por la noche cómo sale de esa entrevista una de las reinas de nuestra televisión.
Fuente: Leer Artículo Completo