Se acerca el final del año y, con él, una atípica Nochevieja. Este año los looks que la protagonizarán serán antagónicos. Mientras unos aprovecharán esta mágica noche para sacar los vestidos más brillantes, las joyas más elegantes y las prendas de lentejuelas que son casi tan características de la última noche del año como las uvas, otros preferirán rendirse ante la tendencia comfty que ha dominado todo el año y finalizar 2020 enfundados en un cómodo conjunto de punto o un pijama especial.
Victoria Beckham tiene clara su posición ante esta dicotomía: el vestido de fiesta sigue siendo la mejor opción para finalizar el año. Aunque, claro está, no hay por qué renunciar a la comodidad. Así lo demuestra la diseñadora británica luciendo un estilismo con un vestido de su firma homónima.
El diseño, en color gris, de manga larga y con espalda descubierta, destaca por estar realizado en viscosa italiana y lúrex. Este tejido, que ya se posicionó como una de las tendencias del año comulgando con los tonos y tejidos metalizados que coparon las pasarelas, fue todo un must durante los años 70 y destaca especialmente por lo favorecedor que resulta al afinar la figura sin apretar ni marcar en exceso.
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Victoria Beckham no ha enseñado en las fotografías qué zapatos ha escogido para completar este diseño de carácter festivo, pero sí que puede verse que ha optado por un maquillaje natural y unas navideña manicura en un atemporal tono rojo.
El vestido en cuestión aún está disponible en la web de la firma en algunas tallas y tiene un precio de 1.450 euros.
¡Lo quiero!
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