Se convirtió en la auténtica protagonista de la Nochevieja estadounidense cuando arrasó en audiencia y crítica con su especial de Año Nuevo junto a Pete Davidson. Aunque sufrió un problema con su vestuario (se le rompió un tirante de su top), y por poco se queda en topless en el escenario, Miley Cyrus tomó las riendas con un comentario tan propio de ella que a nadie le extrañó: «Aunque se me cayese sería de lo más vestida que me habéis visto en mucho tiempo».
Porque si de algo no se avergüenza la cantante es de su físico. En el año en el que abandonará la veintena para soplar 30 velas, Miley sigue siendo una abandera del cuerpo femenino y de quererlo en todas y cada una de sus versiones. Ya sea en el escenario o fuera de él, la intérprete lo potencia sin complejos.
En esta ocasión, Miley ha viajado has Cabo San Lucas (México) con su novio, Maxx Morando, y allí ha lucido un bikini negro que, a pesar de ser un básico, tiene la cualidad de potenciar la figura femenina tanto a los 30 como a los 40.
Fuente: Leer Artículo Completo