Ha sido la reaparición royal (no royal) más esperada. Después de dos años sin pisar suelo europeo (a excepción del príncipe Harry que voló hasta Londres para el entierro de su abuelo) la presencia de los duques de Sussex en los Invictus Games, celebrados en los Países Bajos, supone todo un paso hacia adelante en el nuevo estatus social de Meghan Markle y su esposo.
Para un evento que tiene un gran significado personal para el hijo menor del príncipe Carlos y Lady Di, Meghan Markle ha lucido sus mejores galas. Tranquila, serena y con una sonrisa constante, la esposa del príncipe Harry ha lucido un precioso traje de chaqueta blanco de Valentino. Un diseño un tanto oversize que ha combinado con unos salones blancos y un bolso también de la firma italiana.
Un dúo que bien podría servir para una novia urbana que no quiera complicaciones y, estás de suerte, porque está disponible a la venta online.
Un bolso que arrasará esta primavera-verano
Los diseños blancos minimalistas con un toque geométrico han vuelto. Valentino lo sabe y por eso la pieza one stud es la mejor si quieres un bolso que nunca pase de moda.
Parada en Londres antes de aterrizar en los Países Bajos
Aunque la Casa Real británica no quería que se filtrase la noticia, el periódico Daily Mail publicaba el encuentro que había mantenido el príncipe Harry con su abuela, la reina Isabel II, y con su padre, el príncipe Carlos, en el castillo de Windsor. Es decir, que los duques de Sussex hacían una parada técnica en Londres antes de desplazarse hasta los Invictus Games.
Sin Archie y sin Lilibet, poco más se sabe de una visita exprés que pretendía limar asperezas con la familia real británica después de la polémica entrevista que los duques de Sussex concedieron a Oprah. Al haber viajado sin sus hijos, la reina Isabel II ha perdido la oportunidad de conocer, de momento, a su nieta, Lilibet, quien además le debe su nombre a su abuela.
En cuanto a la posibilidad de que vuelvan a Inglaterra antes de volar de nuevo a California, la prensa británica asegura que no volverán a Londres y regresarán a Estados Unidos tras los Invictus Games.
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