Ayer fue un día muy especial para los Rivera. La presencia de Kiko el pasado viernes en un plató de Telecinco, destapando muchos secretos de su madre relativos a la herencia de su padre, ha provocado un acercamiento con la familia de su padre. Según lo que él mismo relató, ha sido su madre quien, durante todos estos años, se ha encargado de mantenerle lejos de ellos.
Como decimos, este miércoles se producía un antes y un después en esa situación. Acompañado por sus hermanos, Fran y Cayetano, Kiko conoció a su tío, José Riverita. Un encuentro muy emotivo del que dieron muestra en sus redes sociales. También de los momentos previos a que entraran en esa casa y, disfrutando de la intimidad, se dieran los abrazos de rigor y fluyera el cariño.
Fran mostraba en su Instagram una foto con los tres montados en un coche camino a ese destino final. Una imagen con los hermanos Rivera exhibiendo una sonrisa enorme y relajada. Una instantánea que reflejaba, a las mil maravillas, el buen momento que viven entre ellos. Aunque haya sido merced a una batalla de Kiko con la tonadillera, siempre enemistado con los hijos de Carmina.
https://www.instagram.com/p/CHvKt0dFAWM/
Una publicación compartida de Francisco Rivera (@f.r.paquirri)
Precisamente a ella, a Carmina Ordóñez, y a Paquirri les hacía un guiño Eva González, mujer de Cayetano, al lado de esa foto. La presentadora, que aún no había abierto la boca desde que comenzara esta guerra en los medios, escribió unas escuetas palabras que, sin lugar a dudas, hacía referencia a ellos: «Sé de unos cuantos que están sonriendo desde arriba«.
Es más, no se quedaba ahí y también tenía un mensaje que darle a su cuñado Kiko. Se pasaba por su perfil para escribir: «Qué felicidad veros juntos de nuevo«. Porque ella, que lleva una década al lado de Cayetano, bien sabe que la relación entre hermanos ha pasado por múltiples baches que han ido salvando.
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