‘The Dancer’: Lola Indigo, Rafa Méndez y Miguel Ángel cierran sus equipos

  • Ion Aramendi y Sandra Cervera son los encargados de ejercer como maestros de ceremonias en cada una de las entregas de The Dancer
  • Entre los bailarines y bailarinas que pasan por el escenario de The Dancer vemos cada semana personas de todas las edades poniendo en práctica bailes de diferentes estilos

    Solo quedan cuatro plazas para que Miguel Ángel Muñoz, Lola Indigo y Rafa Méndez completen sus equipos en The Dancer con los bailarines a los que llevarán a la próxima fase del talent, La decisión final.

    En esta última jornada de audiciones del programa presentado por Ion Aramendi y Sandra Cervera, Rafa Méndez tendrá el privilegio de dar su Pase Directo a uno de los 14 bailarines que consigan abrir el espejo del plató.

    Entre los talentos que los espectadores descubrirán en la entrega del próximo lunes se encuentra una gimnasta de la Selección española con más de una decena de campeonatos a sus espaldas, una familia de amantes de la danza y una joven que ha superado sus trastornos alimenticios a través del baile.

    Mariú echa el cierre a su recepción y Rafa Méndez da el último Pase Directo

    La recepcionista de The Dancer, Mariú, recibirá con su particular sonrisa a los últimos a aspirantes a clasificarse para ganar el talent show de La 1, y con sentimientos encontrados ya que también será su último día en el programa.

    Tras conocer a los más de 84 concursantes que han sido seleccionados para acudir a las audiciones, Mariú se despedirá de su recepción tras todos los buenos momentos, risas y emociones vividos en el espacio desde su estreno.

    Es el segundo día en el que Rafa Méndez tiene que entregar su Pase Directo para clasificar para semifinales a uno de los concursantes que audicionen en The Dancer. El capitán llegará a conectar y a emocionarse tanto en esta última jornada de selección que buscará el apoyo de sus compañeros e incluso llegará a pedir a Miguel Ángel, Lola Indigo, Ion Aramendi y Sandra Cervera que le apoyen con un estrecho abrazo.

    El coreógrafo tratará de buscar a un bailarín en el que se refleje, con el que intentar ganar el formato, después de traspasar el ecuador del programa y que la lucha entre los capitanes esté más encarnizada que nunca.

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