Llevamos años identificándole como uno de los actores más prometedores de su generación gracias a sus cada vez mejores interpretaciones en la gran pantalla. Si a eso le sumamos sus, en total, tres Premios Goya, y el impresionante debut de Raúl Arévalo como director y guionista en Tarde para la ira, nos quedan pocas dudas.
Pero no se nos puede olvidar que el medio que le dio a conocer para el gran público es la televisión. Ahora que estrena su última serie, Antidisturbios (el viernes 16 de octubre en Movistar), repasamos sus inicios en la pequeña pantalla hasta convertirse en uno de los actores más cotizados del sector audiovisual en nuestro país.
De cuando aún se hacían fotos con carrete y uno andaba entre sueños y Compañeros… ¿qué hizo el tiempo de todos ellos, sueños y compañeros? He aquí a una parte de los «protagonistas» de uno de mis mejores y más gratos recuerdos @raularevalozorzo @alexgarcia_web @begonamaestre_ @montseplapla @albaalonsobayona sin olvidar a Fernando Cuesta, del que no logro encontrar su foto… cuántas risas, cuántos sueños, cuántas ilusiones y promesas… Quizá no estaría de más un reencuentro: ni que sea para contarnos qué hicimos con aquellos chavales y su inocencia… Gracias a Luís San Narciso, Tonucha Vidal y Andrés Cuenca por esa oportunidad y experiencia.
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Y para ello abrimos la puerta del tiempo en 2001, cuando vimos por primera vez a un Raúl de apenas 22 años en el reparto de Compañeros (Antena 3), una de las series adolescentes que dio a conocer a la nueva generación de actores y actrices. Tras disfrutar de su primera gran oportunidad pasó por Hospital Central (Telecinco, 2003) y Cuéntame cómo pasó (La 1, 2003-2004). Mientras en la producción médica apenas estuvo un episodio, en el longevo retrato de los Alcántara disfrutó de un personaje con algo más de recorrido, Basilio.
En 2004 se lanzó a la comedia con La sopa boba (Antena 3), para posteriormente acumular breves incursiones en El inquilino (Antena 3), Motivos personales (Telecinco, 2005), Génesis, en la mente del asesino (Cuatro, 007), Yo soy el Solitario (Antena 3, 2008) y Aída (Telecinco, 2010).
Pero el pelotazo lo pegó en Con el culo al aire (Antena 3, 2012-2014), donde pudo desplegar su faceta cómica durante tres temporadas de buenas audiencias. En pleno éxito de la serie sobre el camping más famoso de la pantalla se aventuró con un proyecto absolutamente rompedor en su carrera televisiva, El tiempo entre costuras (Antena 3, 2013-2014). En ella fue el novio de Sira (Adriana Ugarte) en los primeros episodios, girando hacia el drama, del que ya no ha vuelto a separarse regalando interpretaciones comprometidas y de lo más reseñables.
La madurez de Raúl Arévalo en televisión
En los últimos cinco años Raúl Arévalo nos ha regalado actuaciones memorables en televisión. Desde 2015 se ha vinculado a proyectos con empaque y asumiendo retos interpretativos. Aquel año pasó por Velvet como Víctor Mendoza.
El año siguiente sería uno de los funcionarios corruptos de La embajada de Antena 3 que llevaron por el camino de la amargura a Belén Rueda, Tristán Ulloa, Abel Folk y Úrsula Corberó. También entró en El Continental, ese bar de época por el que apostó La 1 con la intención de explotar su ‘Peaky Blinders‘ particular pero que pronto se desinfló en audiencias sin acabar encontrando el apoyo del público.
Y ahora Arévalo se ha enrolado en el equipo de Antidisturbios de Rodrigo Sorogoyen para Movistar. ¡Y vaya equipo! Álex García (El Continental), Patrick Criado (La línea invisible), Hovik Keuchkerian (La casa de papel), Raúl Prieto (La sala) y Roberto Álamo (Caronte), amigo desde los tiempos de la compañía teatral Animalario.
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