Ya está aquí. Fernando, el documental o docu-serie sobre Fernando Alonso que Amazon Prime Video estrena a nivel mundial esta misma semana, concretamente, el próximo día 25 de septiembre, y nosotros, tras visionarlo, procedemos a desgranarlo.
El mencionado documental se divide en cinco episodios que rozan la hora de duración. Dicho de otra forma, casi cinco horas de entretenimiento sobre la vida de Fernando Alonso. O más que la vida del piloto asturiano, lo correcto sería decir la temporada 2019, incluyendo la participación en el Rally Dakar 2020, la cual tuvo lugar en enero.
Resistencia, Indianápolis y Dakar
Básicamente el documental se divide en tres brazos; Resistencia, Indianápolis y Dakar. Una primera toma de contacto en la que Fernando desvela los motivos que le llevaron a regresar a las 24 horas de Daytona, carrera en la que debutó en resistencia con un prototipo en 2018, pero esta vez con el único fin de ganarlas, lográndolo en una cita marcada por las complicadísimas condiciones meteorológicas.
De Daytona, y algunas carreras de resistencia, Fernando da el salto a Indianápolis. Cambio de monoplaza, de disciplina. Segundo intento del piloto asturiano de llevarse las 500 millas en mes de mayo en el que nada salió como se esperaba.
Aquí el documental nos permite ver ciertas intimidades que habían quedado al margen del público general. Especial hincapié en el accidente y todas las decisiones que se tomaron posteriormente, de cómo el chasis no estaba listo, montándolo prácticamente desde cero. Las dificultades para marcar tiempos, los fallos de reglajes con las confusiones al convertir medidas, el no tener un simple ventilador para refrigerar el motor cuando estaban esperando para salir a pista. Y la posterior no clasificación. La cara más amarga del deporte.
De la amargura de Indianápolis, a Le Mans, donde se lucharía tanto por la victoria como por el título de campeón del mundo de resistencia. Las cámaras acompañan a Fernando en su día a día con Buemi y Nakajima, dejando imágenes y conversaciones que cuestan mucho ver en otras condiciones. En este punto el documental revela ciertas de las fricciones que hubo durante la carrera y el origen de las mismas, cobrando todo mucho más sentido ahora que se conoce la intrahistoria.
Doble victoria en Le Mans, campeón del mundo de resistencia… ¿Y ahora? La tercera parte del documental y a su vez la más extensa, acompaña a Fernando Alonso en su aventura en el Dakar, desde los primeros kilómetros con el Toyota Hilux, cómo junto a su manager van atando cabos para realizar test e incluso algún Rally. Los problemas de adaptación a esta disciplina tan distinta, la falta de tiempo, los vuelcos, todo el proceso de aprendizaje…
El vídeo logra captar cómo la relación entre Fernando y Marc Coma va creciendo con el paso de los kilómetros, como un doble campeón del mundo se siente totalmente abrumado en una prueba tan distinta, aprendiendo día a día, conviviendo con los larguísimos enlaces, con la lectura del terreno, tratando de comprender en tiempo récord lo que pasa alrededor.
Es en este punto dónde más imágenes no conocidas salen a la luz, las conversaciones entre piloto y copiloto, las dudas en momentos críticos, las vivencias antes y después de los incidentes e incluso las sensaciones cuando rozaron la victoria de etapa en el Dakar. Justo lo que cualquier gran aficionado quiere ver, endulzado con multitud de comentarios de Carlos Sainz.
Ausencia de Fórmula 1
Aunque tras el Dakar llegó el anuncio del retorno de Alonso a la Fórmula 1, la presencia de la misma es anecdótica más allá de la infinidad de veces que prensa y aficionados preguntan al piloto por ella, y durante las cinco horas de video, apenas se deja intuir en una conversación no del todo entendible con García Abad en lo que podría ser una hipotética negociación con algún equipo. Algo entendible teniendo en cuenta que el documental parte en enero de 2019 y finaliza 12 meses después.
Lo que echamos de menos
Es posible que el aficionado a Fernando Alonso nunca quede conforme con lo ofrecido y siempre quiera más, pero aquí es imposible no pensar que había más material que no ha sido aprovechado. El drama de Indianápolis tuvo más intrahistoria de la revelada, y aunque es desgarrador ver de fondo a Bob Fernley totalmente abatido, la sensación es que se pasa demasiado de puntillas por un tema que aún deja al aficionado con muchas preguntas.
También se echa en falta más día a día, más conversaciones informales que muestren como el piloto se relaciona con su entorno, pues son muy pocas, aunque interesantes, las veces que se muestran dudas sobre el qué hacer o qué paso seguir.
Una pieza entretenida, que sin llegar a los niveles de drama de Grand Prix Driver, el documental de McLaren sobre la temporada 2018, nos permite ahondar en la vida de Fernando, en sus éxitos y fracasos.
Vía: Car and Driver ES
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