Esta semana supimos que MacKenzie Bezos, la ex mujer de Jeff Bezos desde 2019, se ha convertido en una de las 25 fortunas más importantes del mundo (la número 18) y la cuarta mujer más rica del planeta. Posee unos 45.000 millones de dólares procedentes de ese 4% de Amazon que tuvo que cederle su ex tras su divorcio, una suma que se ha incrementado aún más debido al crecimiento del comercio digital en la crisis del coronavirus. De hecho, la fortuna de Jeff Bezos se ha incrementado en 24.000 millones (hasta los 138.000 millones) y ha tenido que contratar a miles de trabajadores para responder al incremento de la demanda en estas últimas semanas. Sin embargo, su reputación se está viendo cuestionada por la crítica mientras que la de MacKenzie se cotiza muy al alza.
Con la irrupción de la Covid-19 en territorio estadounidense, se ha establecido una especie de carrera filantrópica entre los millonarios del país, deseosos de contribuir en un momento en el que la desigualdad moviliza cada vez más debate social. Por el momento nadie supera a Jack Dorsey, confundador y CEO de Twitter, quien ha donado 1.000 millones de dólares, el 28% de su fortuna, para luchar contra el coronavirus y colaborar en la emergencia social. La pareja formada por Bill y Melinda Gates también ha demostrado una vez más su generosidad, cediendo 250 millones de dólares a la investigación de una posible vacuna y a la situación de emergencia en África y Asia.
Dada la generosidad del los más importantes millonarios del mundo, llama la atención que Jeff Bezos, uno de los empresarios que más se están beneficiando del confinamiento de los consumidores, solo haya donado 100 millones de dólares para responder a la emergencia social por el coronavirus, menos del 0,08 por ciento de su capital. Las críticas que ahora recibe por ello son la fría venganza que ahora se cobra MacKenzie Bezos, quien inmediatamente después de recibir su fortuna se apuntó a la iniciativa ‘Giving Pledge’ (Compromiso para donar), creada hace 9 años por Bill Gates y Warren Buffet para que los millonarios devuelvan a la sociedad parte de sus fortunas a lo largo de la vida o tras su muerte. MacKenzie se ha comprometido la mitado más. De las cinco fortunas más importantes de Estados Unidos, solo una se ha negado a contribuir a ‘Giving Pledge’: la de Jeff Bezos
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