La periodista Mónica Carrillo ha pasado un verano difícil tras diagnosticársele un tipo de cáncer de piel y ser tratada. La misma presentadora de los informativos de Antena 3 ha querido darle eco a su situación en sus redes sociales para lanzar un mensaje de tranquilidad a sus seguidores (se encuentra perfectamente) y ayudar a que nos concienciemos de que hay cánceres muy pequeños, pero muy importantes. Concretamente Mónica Carrilo se le ha diagnosticado un tipo de cáncer de piel llamado carcinoma basocelular. El de la periodista no es el único rostro famoso que ha querido lanzar un mensaje de advertencia sobre este tipo de tumores cutáneos: el actor australiano Hugh Jackman ha publicado en su Instagram más de una vez imágenes con una tirita en la nariz y ha hablado sobre este cáncer que padece desde 2013 y que le ha obligado a pasar por el quirófano del dermatólogo varias veces. ¿Pero qué es el carcinoma basocelular y cómo se trata?
Carcinoma basocelular: el tumor más frecuente en humanos
Los tumores cutáneos son mucho más comunes de lo que nos imaginamos. Sin ir más lejos, el carcinoma basocelular que se le ha diagnosticado a Mónica Carrillo constituye el 80-90% de todos los cánceres cutáneos que se diagnostican y se le considera como el tumor más frecuente en humanos.
De los distintos tipos de cáncer de piel que existen, el carcinoma basocelular no es solo el más común, sino también el que mejor pronóstico tiene si es detectado a tiempo. Su nombre (basocelular) indica que el problema que ha originado el tumor ha nacido en las células basales, las que se encuentran en la capa más inferior de la epidermis. Y como en casi todos los cánceres de piel, la exposición al sol sin protección es uno de las principales causas de este tipo de tumor, por eso es común que aparezca en la cara (como en el caso de Mónica Carrillo y Hugh Jackman que lo han sufrido en la nariz), el cuello y el tronco (especialmente en la zona del escote).
Por lo general la persona que sufre un cáncer de este tipo acude al dermatólogo porque en su rostro ha aparecido una pequeña herida que no acaba de cicatrizar. De ahí la advertencia de la que todo el mundo debería tomar nota: cualquier herida que tarde más de 15 días en cerrarse y cicatrizar debe ser revisada por un médico.
Cómo se cura el carcinoma de células basales
Curarse de este tipo de tumor se puede convertir en una carrera de larga distancia. El tratamiento depende del momento en el que se detecte el tumor: contra antes, mejor, no solo porque la lesión será más pequeña, sino porque el riesgo de que se vuelva a repetir también disminuye. Que el mismo tumor vuelva a aparecer en la misma zona es uno de los principales riesgos de este tipo de tumores, como bien sabe Hugh Jackman cuya nariz ha sido operada ya cinco veces por este motivo. Se calcula que casi el 25% de las personas que sufren uno de estos tumores padecen un nuevo cáncer de células basales en los cinco años posteriores a su primer diagnóstico.
El tratamiento de elección es la cirugía: se extirpa el tumor y se realizan revisiones periódicas para controlar que todo ha salido correctamente. En algunos casos también se puede completar esa cirugía con fármacos que contienen quimioterapia o con radioterapia, pero no es lo más común. Con una cirugía adecuada y respetando al pie de la letra las indicaciones del dermatólogo para proteger la piel el pronóstico de este tipo de cáncer suele ser muy bueno.
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