Don Felipe y doña Letizia han recalado este viernes en Benidorm, quinta etapa de la gira que están realizando por los distintos territorios de España para conocer los efectos de la pandemia.
Tras visitar Cuenca ayer, los reyes han llegado en helicóptero al Parque Comarcal de Bomberos del municipio alicantino junto al ministro de Ciencia e Innovación, Pedro Duque. A continuación, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha recibido a la comitiva en el hotel Belroy, el elegido para la reunión que los reyes han mantenido con un un grupo de empresarios y sindicatos.
Doña Letizia ha aprovechado esta nueva visita para respaldar una vez más a la industria de la moda española. Vestida ayer de Mango y de Zara la semana pasada, en esta ocasión la reina ha recuperado un vestido en tonos rosas de la firma Adolfo Domínguez. Se trata del mismo modelo de corte midi que estrenó el verano anterior en el tradicional posado de la familia real en el palacio de Marivent.
Realizado en lino y algodón, está estampado con claveles y violetas. Su tono rosa ha determinado la elección del calzado: las mismas alpargatas rosas de la marca Macarena Shoes que doña Letizia llevó la semana pasada en su visita a Sevilla y Córdoba. Y también la ropa de don Felipe, que se ha vestido con una camisa de color violeta a juego con su esposa. Como complementos, la reina ha lucido solamente unos discretos pendientes de aro y su inseparable anillo de Karen Hallam.
Terminada la reunión con los empresarios y sindicatos, los reyes han dado un paseo por la playa de Levante para encontrarse con la ciudadanía y apoyar el turismo en Benidorm, un gesto idéntico al que han realizado en el resto de ciudades costeras que han visitado en las últimas semanas.
Después, los reyes volverán a su helicóptero para trasladarse a Valencia. Allí, esta tarde presidirán la entrega de los Premios Nacionales de Innovación y Diseño 2020.
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