Fue una mañana de reencuentros. Reencuentro feliz con la Feria del Libro, con compañeros de otros medios y, sobre todo, con la Reina. Estábamos citados el viernes 10 en la entrada del recinto. En la confluencia del Paseo de Fernán Núñez con el paseo de Venezuela del madrileño Parque de El Retiro. Doña Letizia llegó. Una ráfaga de clics de las cámaras se oyó. Y así, fugaz, se perdió entre las casetas. Esta es su gran cita con los libros.
Comenzó el camino por el stand del Gobierno. Allí me explicaron que le entregaron un ejemplar de J. Laurent, “un catálogo del Museo del Romanticismo”. Justo en frente, en el espacio del Ayuntamiento, también hizo una parada. El stand, que rinde tributo a Emilia Pardo Bazán, recoge esas palabras bonitas: “Madrid es audaz, jaranero y curioso”. La Reina se llevó –me contaron– una encuadernación especial del Centenario de la Biblioteca Musical Víctor Espinós, del Centro Cultural Conde Duque.
Seguí los pasos de doña Letizia: stand de Colombia, como país invitado de honor y bajo el lema “Colombia, diversa y vital”. Letizia fue recibida por la vicepresidenta, Marta Lucía Ramírez, que le entregó un pequeño obsequio (foto inferior). Caseta del Grupo SM, donde se encontraba Roberto Santiago, autor de los mega leídos “Los futbolísimos” (muy aplaudidos en mi casa).
También visitó Turner, especializados en arte y ensayo. Su jefa de prensa, Lola Martín, me sopló que la Reina le había parecido “encantadora y con una clase espectacular”. Muy sonriente, añadió: “Conocía perfectamente nuestro catálogo. Sobre todo, “Un carácter apasionado”, de Alma Mahler. Ya lo tenía.”
Se llevó “Abecedario democrático”, de Manuel Arias Maldonado.Lola recordaba las palabras de la Reina al ver el texto: “Es un libro necesario para todas las generaciones porque habla de nuestro pasado y de nuestro presente”. En la foto, en el stand de la ONCE.
15 visitas en un recorrido de una hora y media. Letizia pasó por Alfaguara. Carlos Rubio me contó que la reina “se había interesado mucho por un libro de Rodrigo Cortés que le había encantado, “Los años extraordinarios” (Random House). Y añadió que se llevó una de las novedades de este año, “Los abismos”, de Pilar Quintana. Entre las fotos, veo que se interesó por “El olvido que seremos”, del colombiano Héctor Abad Faciolince. Maravillosa historia de amor y familia, evocadora y dulce, que me acompañó este verano.
También visitó Planeta. Su directora de relaciones editoriales, Ana Gavin, nos deslizó varios títulos que se llevó la Reina: “Volver a dónde” (Muñoz Molina); “Sira” (María Dueñas); “Los vencejos” (Aramburu); y para Leonor y Sofía, el texto de Alice Kellen “Tú y yo, invencibles”. Me contó que antes de irse, Letizia les deseó suerte: “Que vaya muy bien la feria”.
Después de un año sin casetas, la Reina inauguró la 80º edición. Para una cita que era más esperada que la primavera, tocaba estrenar look. El estreno siempre amplifica el evento. Lo sitúa en el foco y lo ilumina. Un vestido de estreno suma. Suma muchísimo. Así es como yo lo veo. Doña Letizia escogió un Hugo Boss con un estampado de mini confeti alegre y risueño. Lo personalizó con un mini cinturón negro. Mi aplauso va para el estreno, pero sobre todo para el print alegre. Porque después de un año sin feria hay celebrar mucho. Celebrar la cultura y los libros. En la foto inferior, la Reina con Begoña Villacís, también muy interesada en el texto de Abad Faciolince. “Me llevo libros para mis hijas, que son súper lectoras”, nos dijo.
Antes decía que fue una mañana de reencuentros. Lo vi también en el hahstag: #laferiadelreencuentro. Sensible, permeable y cercana al latido de la gente, la feria ha reabierto sus puertas con ese espíritu de reencuentro con los libros. Un camino por la lectura, con las casetas abiertas y el olor a papel. Todo muy presencial, como antes era la vida (antes de la pandemia).
Fuente: Leer Artículo Completo