Ben Affleck escribía una carta abierta hace unos meses en los que no solo reconocía sus problemas con el alcohol, sino que, además, pedía perdón a su familia y a todos los que había martirizado por culpa de sus adicciones. En una entrevista reciente también decía ser consciente de que esos problemas fueron los causantes de que Jennifer Garner no pudiera más y le pidiera el divorcio.
Affleck, que sabe que es una enfermedad con la que tendrá que lidiar toda la vida, está luchando para hacerle frente. Son varias las veces que ha tenido que buscar ayuda en la rehabilitación. La última, mientras trabajaba. Sí, uno de sus compañeros de rodaje en ‘The way back’, la cinta que está a punto de estrenar, ha puesto en valor el tremendo sacrificio que ha hecho Ben para compaginar las sesiones de rehabilitación con las jornadas de rodaje.
Es unas declaraciones a ‘People’ donde Will Ropp ha querido ensalzar a su colega de profesión. «Hubo mucha transparencia desde el principio, de que estaba en rehabilitación al comienzo de la película«, explica sobre cómo afrontó todo el equipo la situación. «Tenía que tener un enlace sobrio que lo llevaría al set y que lo llevaría de regreso al mismo», detalla.
En la película, Ben da vida a un hombre divorciado y que tiene problemas con la bebida. Sin duda, su experiencia le ha servido para interpretar mejor que nadie al personaje. «Hay algunas cosas sobre este personaje con las que realmente podría conectarme: ser un alcohólico en recuperación, pasar por conflictos familiares, un divorcio», ha dicho Affleck con naturalidad durante la promoción del filme.
«Intentas llevar tu propia experiencia de vida a las partes en las que puedes usar tu imaginación en las otras partes», continuaba Ben, que terminaba la reflexión al respecto que «una de las cosas bellas de una película que permite expresar un sentimiento genuino». El suyo, sin duda, lo es.
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