Cuando Gwyneth Paltrow apareció en la alfombra roja de los Globos de Oro enfundada en un vestido transparente de Fendi, lo tuvimos claro: las transparencias habían vuelto, y no necesariamente siguiendo siempre la estela del ‘naked dress’ que inevitablemente asociamos con Jennifer Lopez. Su vestido era insospechado por un motivo muy concreto: su silueta respondía a la tendencia del ‘modest fashion’ que llevaba algunos meses entre nosotros, pero sus transparencias echaban por tierra su vocación más casta.
Mientras que ese inolvidable ‘naked dress’ de Adam Selman confeccionado con 230.000 cristales de Swarovski cosidos a mano hizo que Rihanna se convirtiera en la estrella de esta tipología de vestidos, apostando para ello por la lencería casi invisible de la marca Commando, esta temporada las celebrities prefieren que los vestidos transparentes acompañen a la lencería ‘granny’.
Las temporadas pasadas la castidad se había impuesto sobre la alfombra roja. Jodie Comer apostó por un voluminoso vestido esmeralda de Mary Katrantzou de mangas abullonadas imposibles y silueta de volumen XXL que nos hizo preguntarnos si realmente no había llevado a su +1 a la fiesta debajo de su vestido.
Selena Gomez fue más allá al decantarse por una majestuosa falda combinada con un top de cuello vuelto de Givenchy con el que hasta la suegra más tradicional habría estado feliz. Ni un centímetro de piel era capaz de escaparse de este diseño con el que parecía imposible volver a hablar jamás de un ‘naked dress’.
Hasta que llegó Gal Gadot, que apostó por la misma firma en una clave similar, pero a su vez, completamente diferente. Mientras que la falda apostaba por ese volumen hiperbólico que habíamos visto en el diseño de Selena, el encaje de la parte de arriba subía la temperatura del look.
Parece que en la era del #metoo, el ‘modest fashion’ había querido que la moda más reveladora se quedara en casa una temporada para dejar que la siguiente tendencia fuera la de los vestidos ‘womanspreading’, pero después de los diseños XXL, la alfombra roja ha vuelto a reclamar el triunfo de las transparencias.
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