El estreno hace un año del documental Leaving Neverland cambió para siempre la percepción que el público tenía de Michael Jackson. Aunque la importancia de su legado musical sigue siendo incuestionable, sí que fueron miles las personas que ‘cancelaron’ al rey del pop tras escuchar en esa película las historias de dos hombres que aseguraban que Jackson abusó de ellos cuando eran menores. Unas durísimas acusaciones que, todavía hoy, siguen sin haber sido demostradas.
Pero ese documental no solo cuestionó la figura del cantante. Aunque no quiso entrevistarse con el director Dan Reed para dar su versión, el actor Macaulay Culkin también aparecía en varias escenas que recordaban la amistad que entabló siendo una estrella infantil con el autor de Thriller. Una relación muy cuestionada en la película sobre la que el protagonista de Solo en casa ha mantenido siempre un silencio sepulcral. Hasta ahora.
En una entrevista con la edición americana de la revista Esquire, que le dedica su portada, Culkin ha querido contar por primera vez toda la verdad sobre sus años de convivencia con Michael Jackson. Un relato que no deja en buen lugar a los autores del famoso documental, ya que el actor niega que él viviera algo parecido a lo que ellos aseguraron.
“Mira, voy a empezar con un titular que es la verdad: él nunca me hizo nada. Tampoco le vi hacer nada a nadie. Y a estas alturas no tengo motivo alguno para guardarme cualquier información al respecto”, explica Culkin.
“A lo que me refiero es que Michael está muerto. Y sin entrar en si es elegante o no, este es el mejor momento para hablar de todo aquello. Si tuviera algo que desvelar, lo haría sin pensarlo. Pero insisto, yo nunca vi nada”, sentencia el actor, que sigue considerando al cantante uno de sus mejores amigos.
Así al menos lo demuestra con otra historia relacionada con el estreno del documental, por el que James Franco le preguntó después de que ambos se encontraran en un avión. “Me preguntó qué me parecía Leaving Neverland, y yo le respondí que sí a él le apetecería hablar de algún amigo suyo que estuviera muerta. ‘No, la verdad es que no’, me respondió. Así que yo le dije que todo estaba bien entre nosotros y que me alegraba de verle”, concluye.
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