Tras las polémicas que han protagonizado Harry y Meghan con su salida de la Familia Real británica, hemos podido notar algo de paz entre los otros miembros de la realeza. Los duques de Cambridge han presidido su primer acto público tras la reunión privada celebrada el pasado lunes en Sandringham. La pareja se ha dejado ver muy sonrientes y como si la tormenta no estuviese en sus cabezas. Los duques acudían a Bradford con el objetivo de conocer de primera mano una serie de proyectos que apoyan a la comunidad y promueven la cohesión dentro de ella.
En primer lugar, Kate y Guillermo han visitado el Ayuntamiento en la Plaza del Centenario de Bradford para conocer al pueblo británico que se han acercado hasta las inmediaciones para saludar a los duques. Hoy tienen un día muy completo, ya que también acudirán a diferentes centros. Para la cita, Kate escogía un look bastante básico que demuestra su lado austero. Y es que, siempre acierta con el estilismo de cada evento. El look estaba compuesto por un nuevo abrigo de color verde y de carácter militar de uno de sus diseñadores favoritos, Alexander McQueen, que ha conjuntado con unos clásicos tacones negros con tacón cuadro y un minibolso de piel de cocodrilo con broche joya.
Cuando la duquesa de Cambridge se desprendía de su abrigo, pudimos ver que su elección era la correcta. Un vestido de Zara con el estampado del momento -príncipe de gales-, lazada al cuello, todo abotonado y cinturón incluido. Lo más relevante de la prenda es su precio, 19,99 euros.
Fuente: Leer Artículo Completo