Cada temporada tiene sus propios desafíos y si de algo se caracteriza el invierno y la bajada de temperaturas, es de que en esta temporada la piel presenta un aspecto más seco y apagado que el resto del año. El efecto del frío sobre la piel acaba haciendo que la epidermis no se renueve tan rápido y es entonces cuando se acumulan las células muertas. Todo esto acaba dando como resultado una piel apagada, mucho más sensible y tirante. Pero si tu piel además es de tendencia seca por naturaleza, entonces estos efectos pueden acabar convirtiéndose en un auténtico quebradero de cabeza, sobre todo cuando recurres al maquillaje.
Y es que si ya de por si dominar el arte del maquillaje no es fácil, aplicar maquillaje cuando tenemos la piel seca puede acabar pareciendo una misión imposible. ¿La razón? La base de maquillaje no se fija tan bien a la piel cuando está reseca y mal aplicada, puede incluso acentuar ese efecto de piel seca y sin vitalidad. Si todo esto te resulta familiar, entonces es el momento de que tomes nota de los trucos que hemos recopilado y que te ayudarán a maquillar tu tipo de piel como una verdadera experta.
Limpieza facial y exfoliación:
Realizar una buena limpieza facial por la mañana y por la noche es un paso esencial del que no podrás olvidarte, ya sea usando jabones específicos, agua micelar, espumas o desmaquillantes en crema. En el caso de las pieles secas es recomendable no recurrir a limpiadores demasiado fuertes y tampoco olvides secarte con pequeños toquecitos.
Al mismo tiempo, la exfoliación es otro paso crucial cuando se trata de cuidar la piel y de prepararla para el maquillaje. Utiliza para ello un exfoliante adecuado a tu tipo de piel y ten en cuenta que la zona de la nariz, del mentón y las cejas, es donde más tiende a secarse la piel en invierno.
Hidratación extra:
Un paso esencial para minimizar los estragos de las bajas temperaturas en nuestra piel, es hidratar la piel a diario y varias veces al día. Nosotras te aconsejamos que aproveches a aplicarte crema hidratante sobre todo cuando la piel aún esté húmeda, de esta manera el efecto hidratante durará más tiempo y si es con protector solar aún mejor.
Base de maquillaje adecuada y primer:
Con pieles secas, lo más recomendable es recurrir a fórmulas líquidas y huir de las fórmulas en polvo, ya que estas pueden hacer que nuestra piel seca se note aún más. Procura que la base esté especialmente indicada para pieles secas y que garantice un acabado radiante y jugoso en la piel.
Usar prebase o primer debajo de la base y de la sombra de ojos, también puede ser una buena opción para ayudar a que el maquillaje se quede en su lugar y para hacer más fácil su aplicación.
Correcta aplicación:
La batalla para lograr un maquillaje perfecto cuando nuestra piel es seca, no solo depende de la base de maquillaje y los productos que utilicemos para ello, sino que también tendremos que tener muy en cuenta su aplicación. Para empezar debemos evitar extender la base con los dedos o arrastrarla con cualquier esponja o brocha, la forma más efectiva será aplicarla a pequeños toquecitos con una esponja para mezclar y lograr una buena cobertura.
Productos en crema:
Cualquier bronceador o colorete que quieras aplicarte, deberá ser en formato de crema y no en polvo. Los polvos podrían hacer que tu piel se vea incluso más apagada.
Despídete de los labiales mate:
Al igual que nuestro rostro puede verse seco, nuestros labios también. Para evitar ese efecto, es recomendable que no apliques labiales en lápiz o labiales mate y que te ayudes de algún exfoliante para labios, gloss o labial con brillo para dar un aspecto más jugoso e hidratado a los labios.
No te olvides del iluminador:
Para aportar ese toque extra de luz a las zonas clave del rostro y huir del efecto mate y opaco, puedes ayudarte de iluminadores en formato líquido o en crema. Estos te darán el resultado que buscas y definirán tus facciones.
¿A qué esperas para ponerlos en práctica?
Fuente: Leer Artículo Completo