Esta edición de los Globos de Oro tiene un indiscutible sabor español. Pedro Almodóvar y Antonio Banderas están nominados. Ambos han vivido ya la experiencia, aunque puede que esta sea la vez que sus nombres suena con más fuerza. Llegan a unos premios con Banderas nominado a mejor actor por interpretar a Salvador Mallo, alter ego de Pedro Almodóvar en Dolor y gloria, también nominada a mejor película extranjera. Un rizar el rizo perfecto si finalmente se llevan el premio (casi perfecto por haber llegado hasta aquí y a los próximos Oscar).
Junto a ellos, una española (de origen cubano) más, Ana de Armas, candidata a mejor actriz de comedia por su papel como Marta Cabrera en Puñales por la espalda. Y así, los tres juntos, en Los Ángeles cuentan los minutos hasta que sean las dos de la madrugada del domingo al lunes (siete de la tarde del domingo hora local) y arranque en el hotel Beverly Hilton la ceremonia de entrega de los galardones que concede la Asociación de la Prensa Extranjera de Hollywood. Pedro Almodóvar se ha fotografiado con ambos, por separado, y su hermano Agustín lo ha contado en Twitter.
Una tercera fotografía (y última por el momento) es, sin embargo, bastante más rara por lo excepcional del trío que aparece en ella: Pedro Almodóvar charla animadamente con Joaquin Phoenix (nominado también a mejor actor, competencia de Banderas, por su interpretación de Jocker) y Quentin Tarantino aspirante a varios globos (mejor película y mejor director, los más importantes) por su Érase una vez en… Hollywood protagonizada por Leonardo DiCaprio y Brad Pitt (ambos también nominados en categorías diferentes a las de los anteriores).
Agustín Almodóvar escribe ante lo insólito de la imagen: “Joaquin, Pedro y Quentin, contendientes a la par que amigos. El cine sigue en buenas manos”.Y hay poco más que añadir aparte de que ya queremos que empiecen estos Globos de Oro tan españoles y, por qué no, ¿alguna colaboración?.
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