Pero que no cunda el pánico porque, en efecto, este vestido está incluido en la nueva sección Mum de Zara –¿en prevision de la futura maternidad de Marta Ortega?–, pero cualquiera puede ponérselo porque, creednos, no se nota absolutamente nada. La historia es la siguiente: hace tan solo unos días que la firma de Arteixo decidió reforzar la sección de premamá y convertirla en una verdadera fantasía; las piezas más bonitas de Zara están incluidas en una sección que recoge los abrigos de lana más elegantes, los vestidos de punto más estilosos y los jerseys más apetecibles. Mención aparte merece la paleta tonal de la colección: desde un violeta intenso hasta un verde esmeralda, pasando por negros, grises y camel. Cierto es que es muy posible que la maternidad de la heredera esté relacionada con el nuevo posicionamiento de la sección de la firma dedicada a las futuras mamás –quienes, hasta relativamente poco tiempo, no tenían demasiadas opciones donde elegir entre las prendas más tendencia– pero, sea como sea, queremos llevar todas y cada una de las piezas de esta colección (aunque no vayamos a ser madres próximamente) y, más aún este vestido midi de tul exactamente como lo proponen desde Arteixo.
© Cortesía de Zara
A mitad de pantorrilla (perfecto midi), está hecho de un delicado tul bordado que se abullona en el cuello, en las mangas (súper voluminosas, como mandan los cánones) y en el bajo, que compone un volante alrededor. Semitransparente excepto en la zona en la que no debe serlo, lleva una combinación de satén por debajo que no hace sino elevar su atractivo. Cierto es que este vestido cumple con todos los mandamientos que imponen las tendencias del invierno, a saber: silueta con volumen, cuello cerrado, largo midi y tul, pero lo que realmente nos enamora es el estilismo que compone uno de los looks más cool de la firma gallega en los últimos tiempos.
© Cortesía de Zara
En primer lugar, los calcetines oscuros nos parecen el súper acierto del look. Aparentemente protagonistas de una combinación imposible, son capaces de contrarestar el exceso de azúcar de tules, volantes y polka dots; muy en la línea, los mocasines de horma perfecta (ni demasiados finos ni tampoco excesivamente rudos), ponen la nota masculina en un look que, si pecase de algo,sería de ser femenino en exceso. Por ultimo, el jersey de punto grueso en blanco roto alrededor del cuello, a modo de bufanda, se encarga de la nota informal y de completar un look redondo.
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