Pensar en iconos de estilo de los años 80 y 90 es pensar, irremediablemente, en Carolina de Mónaco y Diana de Gales. Ambas princesas demostraron por aquel entonces que la moda era una de sus pasiones e hicieron de sus armarios toda una declaración de intenciones, expresaron su personalidad a través del mismo y, ha día, el estilo de ambas se ha convertido en un símbolo que ha trascendido generaciones.
Tanto la princesa de Mónaco como Lady Di fueron expertas en actualizar los códigos de estilo de la realeza. Se atrevieron con accesorios y combinaciones inimaginables antes e, incluso, se demostraron admiración mutua. La mejor prueba de ello es un look que ambas llevaron igual, casi exacto al milímetro.
Hablamos de un estilismo compuesto por una americana bicolor blanca y negra, una prenda que Diana de Gales adoraba y que lució en infinidad de ocasiones. Una de las más recordadas tuvo lugar en 1986, cuando Lady Di eligió una americana blanca con solapas negras para acudir a la Exposición Internacional de Vancouver.
Aunque no habíamos reparado en ello hasta ahora, dos años después, en 1988, Carolina de Mónaco lucía una blazer muy similar a la de Diana.
No se trata únicamente de que ambas royals coincidieran luciendo una americana bicolor casi idéntica. Carolina y Diana también se pusieron de acuerdo en el resto del estilismo, completando la americana con una parte de abajo de color negro y poniéndose de acuerdo también en los accesorios luciendo ambas una diadema de terciopelo negro, con un nudo en el caso de Diana y una lazada en el de Carolina, que a día de hoy resulta de lo más inspiradora para looks de invitada.
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