Tras confesar que no invitó a su hija a su boda con Fidel Albiac, Rocío Carrasco dejó caer que Rosa Benito, que sí que estaba invitada, cambió de opinión a última hora por presiones familiares de parte de sus tíos, quienes le hicieron elegir entre el enlace o poder seguir viendo la procesión de la Virgen de Regla desde el balcón que los Mohedano tienen en Chipiona. Este viernes, desde el plató de ‘Ya es mediodía’, la aludida ha querido explicar el motivo de que, pese a que había ido a la peluquería para asistir a la boda, al final no se presentó. “Yo tenía un moño bajo hecho, un vestido maravilloso, no voy a hablar de las personas con las que hablé porque son anónimas y son parte de mi vida… No tenía nada que ver el balcón”, explica la colaboradora.
De esta manera, Rosa Benito confiesa que sí que habló con alguien que le hizo cambiar de opinión para que no fuera a la boda. “Hablo con una persona que me expone una situación, no sé cómo llamarlo, me quedo pensando y digo: “Tienes razón, cariño”. Me quedo pensando y decido no ir… Yo iba a ir a esa boda por ella y porque es hija de quien es y no fue por el balcón”.
Sobre si se arrepiente de no haber ido, la que fuera cuñada de Rocío Jurado ha dicho que es una tontería hacerlo a toro pasado y que lo importante es que sus hijos sí que estuvieron presentes. A su vez, se ha mostrado muy contenta de haber escuchado a su sobrina hablar tan bien de ella en la décima entrega de su serie documental. “Me gusta oírla decir que me quiere, es muy importante. Me gusta porque hace mucho tiempo que no se la oía decir”. Además, ha confesado estar dispuesta a hablar con su sobrina para retomar el contacto. «A mí lo que me gustaría es que esos teléfonos se descolgaran, tanto por mi parte como por la de ellos, y volver a ser la familia que éramos”.
Invitada a la fuga
“Rosa creo que, según me han contado, estaba en la peluquería, ya saliendo peinada para asistir a la boda, pero recibió una llamada y optó por declinar la invitación”, expuso Rocío Carrasco en el último capítulo de ‘Rocío, contar la verdad para seguir viva’ al hablar de los invitados de su boda. “No me dolió. Tenía buena relación con ella, mi tía Rosa ha sido muy importante para mí en mi vida igual que todos mis tíos, y una cosa es que la invite porque yo la quiera y otra cosa es que me importe o me duela que no vaya”, reflexionó la presentadora.
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