A un ritmo lento y siempre bajo estrictas medidas de seguridad dictaminadas por las autoridades, la industria de la moda ha comenzado a recuperar la normalidad previa a la etapa Covid. El anuncio reciente de la Fédération de la Haute Couture et de la Mode (Federación de la Alta Costura y la Moda francesa) sobre la Semana de la Alta Costura de París es el mejor ejemplo: la aclamada cita parisina volverá a contar con desfiles presenciales.
El comunicado emitido por el organismo responsable de la cita más importante de la moda en Francia hace referencia a la inminente edición, programada entre el 5 y el 8 de julio. Además, como bien apuntan en el mismo comunicado, «dependiendo de la evolución de la situación sanitaria, los eventos físicos pueden volver a acoger a público de acuerdo con un protocolo de salud específico y ajustarse a medidas aún por determinar por la autoridad pública».
A pesar de que han sido pocos los detalles confirmados sobre esta cita de Alta Costura, será el 7 de junio cuando se dará a conocer el calendario oficial y los datos sobre qué casas de moda optan por este formato tradicional, esta medida es un soplo de aire fresco para una industria que ha sido golpeada con fuerza por la pandemia este último año.
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De la misma manera ocurre con la edición masculina, que será celebrada del 22 al 27 de junio, también se ha confirmado el regreso al formato tradicional. Por el momento Nueva York también ha informado del regreso a la presencialidad para su edición de septiembre, al igual que Italia que, si la situación del país así lo permite, retomará los desfiles tradicionales para la próxima fashion week masculina.
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