No es ningún secreto que a Juan Abelló Gallo, primera escopeta nacional, le fascina la caza tanto como coleccionar obras del paisajista veneciano Canaletto. A este hombre el campo no para de darle alegrías. No hablamos de los venados, ni de los corzos, ni de la perdiz roja, entre otros muchos animales que disfrutan por sus más de 40.000 hectáreas repartidas entre Toledo, Albacete, Ciudad Realy Cádiz. Unas fincas que comparten código postal con las de los Cortina, Banús, Oriol, Alcocer, Botín, Lao o su ex- socio Mario Conde. Hablamos, en este caso, de campos sembrados de marihuana para uso medicinal y recreativo. Que los Abelló se hayan lanzado con éxito a por un buen pedazo del negocio mundial del cannabis no es casualidad.
Basta bucear en la historia de esta familia, una de las más poderosas de España y con nombre a escala internacional gracias a una diversificada fortuna de 2.200 millones de euros, según Forbes. Esta saga originaria de Tarragona fundó su imperio con las llamadas drogas legales. Su padre, Juan Abelló Pascual(Reus, 1895-Madrid, 1983), doctor en Farmacia y Ciencias Químicas, era el presidente de Laboratorios Abelló, exfabricante, entre otros, del antigripal Frenadol, un medicamento aún hoy superventas. Pero su negocio no se limitó a España. En 2007 la empresa llamada Alcaliber, cuyo dueño era entonces Juan Abelló Gallo, logró el permiso del gobierno estadounidense para exportar opio y sus derivados. Ese año se puso fin a un viejo contencioso con Estados Unidos que históricamente ponía coto a la entrada de producción de opiáceos desde España. Abelló, escopeta en mano y verano en Marbella mediante, le dio a la máquina registradora y se convirtió con Alcaliber en el productor del 27% del mercado mundial de morfina y acaparó el 18% del de tebaína. En suma, antes lo que lo hizo rico fue una planta llamada Papaver Somniferum, comúnmente conocida como adormidera o amapola real, que contiene componentes químicos de los que se deriva el opio, y ahora, otra llamada cannabis, cáñamo o marihuana.
Las pérdidas por la crisis de los opiáceos en Estados Unidos lo llevaron a desprenderse de Alcaliber. La venta en 2018 fue el punto de partida para que Torreal, vehículo inversor de la familia Abelló-Gamazo, y un fondo llamado GHO pusieran en marcha una empresa con nombre de naturalista sueco del siglo XVIII: Linneo Health ¿Los porcentajes de esa operación? El 40% de la compañía es para los españoles y el 60% es para los británicos de GHO. Esta firma, con sede en la madrileña calle de Génova, tiene una gran ventaja, ya que es la que primero ha conseguido la licencia por parte de la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps) para producir y comercializar flor seca de cannabis. En Linneo, a través de Torreal, participa el clan Abelló al completo. Hablamos de su esposa, la aristócrata Anna Gamazo Hohenlohe-Langenburg, y sus cuatro hijos, Juan Claudio, de 57 años, Alejandro, de 50, Cristian, de 43 y Miguel, de 39, quien, a pesar de ser el benjamín, tomó el relevo a su padre al frente de la compañía el pasado 25 de febrero. Todos saben que van a liderar el mercado español, que actualmente es cosa de otros tres operadores que no tienen la experiencia de esta familia. El mercado a escala mundial está en plena ebullición, por las posibilidades que ofrecen los usos medicinales de esta droga y tras la decisión de grandes potencias como Canadá de legalizar el uso recreativo de la marihuana, también en vigor en nueve estados de EE UU —Alaska, California, Colorado, Maine, Massachusetts, Nevada, Oregón, Vermont, Washington— y en Washington D. C.
Linneo Health cuenta con una capacidad para la producción de flores de cannabis de cuatro hectáreas repartidas entre Murcia y Castilla-La Mancha, siendo la primera la provincia donde han alquilado tierras para este cultivo. Lo que oyen: a pesar de ser el mayor terrateniente de España, ha decidido alquilar por las condiciones climatológicas que requiere el cannabis. Se espera que en 2021 lance su primer producto, porque la primera cosecha ya la han recogido con éxito. Con esta empresa diversifica aún más sus inversiones. El que fuera vicepresidente de Repsol cuenta con un patrimonio de 2.280 millones solo en Torreal gracias a sus participaciones nacionales en empresas como Talgo, Telepizza… pero también firmas extranjeras, ya que tiene acciones en Aston Martin, su gran joya de la corona. Solo en 2018, último ejercicio presentado, ganó 355 millones de euros, su cifra más alta en más de una década, tras la venta del gestor de parkings Saba e Imagina Orient Hontai.
La del cannabis se advierte como una de sus apuestas más jugosas en el medio plazo, aunque oficialmente Abelló esté jubilado y una de sus mayores preocupaciones sea el estado de su gran amigo el rey don Juan Carlos. Algunas consultoras señalan que el mercado del cannabis puede llegar a mover en España 50.000 millones de euros en 2026. Los Abelló celebraron por todo lo alto en Marbella este verano que la agencia del medicamento de Alemania (BFARM) anunciara que las empresas germanas podrán desde esta semana importar productos relacionados con la marihuana para su uso medicinal. Una decisión que favorece, principalmente, a esta poderosa familia.
Quién es quién en el clan Abelló-Gamazo
Miguel
Desde el 25 de febrero de 2020 este joven de 40 años es presidente ejecutivo de Torreal. Licenciado en Derecho y máster del IE, es el benjamín del matrimonio. En 2011 se casó con Carmen Frühbeck en Las Navas, la finca toledana de caza que los Abelló poseen en Los Yébenes.
Juna Claudio
Primogénito y vocal, como el resto de sus hermanos, de Torreal. Se casó en 2000 en Las Jarillas con Marta del Rey y Gui, hija adoptiva del fallecido Isidoro Álvarez, dueño de El Corte Inglés. El rey Felipe VI y la infanta Elena ejercieron de testigos.
Alejandro
Participa en la empresa del cannabis a través de Torreal, donde es consejero. Fue el último en casarse. Lo hizo en 2019 con Marina Valcárcel y Silvela, exmujer de Pedro Argüelles, exsecretario de Estado de Defensa.
Cristian
Es el tercer hijo del magnate y parecía el heredero hasta que llegó Miguel. Su gran apuesta, además de Torreal es el subsuelo, el negocio de los parkings, a través de su fondo Firmum Capital. Está creando su propio family office.En 2006 se casó con Paula Luengo Artiñano, directiva del Thyssen-Bornemisza. Tras divorciarse, en 2012 contrajo matrimonio conAna María Bareño.
Y mientras…
Francisco von Bismarck
No ha encontrado en la Marbella de la jet set que aupó a sus padres la fuente de sus ingresos. Tras estudiar en Harvard, creó junto con unos socios la red social Tuenti, que terminarían vendiendo a Telefónica en 2006 por 70 millones de euros. Desde entonces inició un abanico de inversiones con suerte desigual. Fundó Terrace Global Inc, una empresa canadiense, y adquirió plantaciones en Uruguay, el primer país en legalizar el cannabis. Hablamos de 2013. Con esta empresa, Ortiz, que aún figura en la lista de morosos del Fisco español, pretende entrar en Europa. Lo hará a través de Portugal, donde cuenta con una licencia provisional de exportación.
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