Originario de los bosques del sur de África y Madagascar, el árbol marula es de tamaño mediano y genera unos frutos que los habitantes de la zona han sabido aprovechar de diferentes formas, especialmente las mujeres. Expertas en la manipulación de los frutos, las namibias llevan generaciones trabajando con ellos: los secan al sol para después abrirlos y extraer su jugo, de un color claro y olor suave similar al del aceite de almendras. Así es como consiguen aceites para conservas o fabrican bebidas alcohólicas procedentes de la marula, una importante fuente de ingresos. Además de su uso alimentario, su extracto también sirve como aliado perfecto para la piel: uno de los secretos mejor guardados de las mujeres africanas para cuidarse es el aceite de marula. Pero, ¿por qué hablar del aceite de marula si conocemos una infinidad de aceites más? Estos son todos sus beneficios:
Nutrición profunda
Las pieles grasas suelen temblar al escuchar la palabra ‘aceite’, pero no deberían hacerlo si va acompañado de ‘marula’. Apto para todo tipo de pieles, este aceite promete hidratar en profundidad el cutis sin aportar exceso de sebo ni brillos indeseados. Se trata de un aceite seco -entra dentro de esta categoría gracias a su textura ligera y a su origen vegetal- que penetra rápidamente hasta las capas más profundas de la piel, de forma suave y cuidadosa.
La hidratación que aporta es ideal tanto para el cutis como para la epidermis del resto del cuerpo y ayuda a proteger la barrera lipídica de la piel, que a menudo se ve amenazada con los agresivos productos de limpieza que utilizamos. Mantiene la hidratación durante horas, por lo que también muy beneficioso para las pieles secas, porque evita la tirantez y la irritación que pueden llegar a sufrir.
Antioxidante con vitamina C
Tantos son sus beneficios que su estima lo ha llevado a ser considerado por muchos como el ‘milagro africano’ o el ‘oro africano’. Sus altas propiedades antioxidantes lo diferencian grandemente de otros productos similares como el aceite de oliva. La vitamina E y otros compuestos con las mismas propiedades antienvejecimiento, además de su concentración de ácidos grasos esenciales, lo convierten en el producto perfecto para evitar el envejecimiento prematuro, además de combatirlo.
Se trata de un producto muy rico también en vitamina C, que estimula la producción de colágeno y mejora la elasticidad de la piel. Por otro lado, su efecto peeling va renovando las capas más superficiales de la piel. Gracias a esta última propiedad, el aceite de marula aporta, además de efectos antioxidantes, una gran luminosidad al cutis.
Un aliado contra el acné y las estrías
Ese efecto renovador de las capas más superficiales de la piel del que hablábamos, sirve como potente producto contra el acné, ya que ayuda a limpiar la piel y evita que se acumule el sebo en cantidades perjudiciales para pieles sufren de esta afección. Las rojeces e irritaciones que se dan en las pieles acneicas también se pueden ver beneficiadas y atenuadas con el uso del aceite de marula, puesto que sus propiedades antimicrobianas y antibacterianas también pueden ayudar a nuesta epidermis a librarse de las incómodas infecciones. Que también son más frecuentes ahora que necesitamos utilizar mascarillas cuando salimos a la calle.
Además, no solo supone una ayuda para mejorar la salud de las pieles acneicas, sino que también puede ayudar a tratar las consecuencias que dejan los granitos como cicatrices o manchas de la piel. Sus propiedades antienvejecimiento y renovadoras de la piel, a las que se suman los efectos de la vitamina C, nos ayudan a librarnos de las marcas e incluso la hiperpigmentación. Su amplio poder de hidratación también se suma a las propiedades anteriores para tratar las temidas estrías -un punto a favor para mujeres embarazadas- e incluso para tratar quemaduras.
Amigo de las pieles sensibles
Tan suave es su fórmula que las mujeres namibias, además de usarlo en su propia piel y para masajes, también lo utilizaban y lo siguen utilizando con sus bebés. Lo mejor de todo no es que con el aceite de marula podamos hidratar las vulnerables pieles de los más pequeños de la casa, que también, si no que además podemos tratar las zonas más delicadas de la nuestra, como el contorno de ojos, o algunas afecciones complicadas. Algunos expertos lo recomiendan para aliviar los problemas que pueden experimentar las pieles que sufren de dermatitis, inflamaciones, psoriasis e incluso rosácea. Afecciones que mejorarán principalmente gracias a su potente hidratación.
Mil y una formas de utilizarlo
Su uso está recomendado tanto para las mañanas como para las noches y dependiendo de cómo lo utilicemos conseguiremos unos beneficios u otros. Al utilizarlo por las mañanas estaremos beneficiando a nuestra piel de sus propiedades protectoras contra agentes externos y aportaremos un extra de luminosidad que durará hasta los días más largos. Sin embargo, su uso nocturno puede traer incluso más beneficios, puesto que por la noche es cuando se produce la reparación celular en nuestra piel y el aceite propiciará que suceda de forma más rápida y eficaz.
Otra opción que puede aportar beneficios a nuestra epidermis es utilizarlo junto con un limpiador o exfoliante. El aceite de marula ayudará a arrastrar más suciedad y a la vez protegerá la famosa barrera lipídica de la piel, ayudando a no eliminar toda la hidratación con la limpieza y arriesgarnos a dejarla desprotegida.
Aceites puros
Ahora que viene el verano, el aceite de marula puede servir para proteger y reparar toda nuestra piel y nuestro cabello de las agresiones a las que les sometemos como el sol, la arena, la sal, el cloro…
Combinados con otras sustancias
Todos los beneficios del aceite de marula se pueden sumar a los que aportan otros aceites como el de rosa mosqueta, el de aguacate o el de flor de brasil, para obtener los mejores resultados en cara y cuerpo, combatir la sequedad y librarnos de las estrías.
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